Partido de los que no pasaran s la historia. Unos por un juego lento y anodino, excesivos te predecible. Otros por dedicarse a aguantar el empate como el súmmum del resultadismo. Pero esto es así. Los pequeños deben defenderse como pueden contra estos equipos de presupuestos mastodónticos aunque sin superar en esfuerzo al pequeño.
Poco que destacar del mismo. Un Barça que no es que no fuera voluntarioso, pero se acomoda con la posición atrasada del rival y pensando que con su poderío de jugadores técnicos el gol llegará en cualquier momento, se deja ir. Así van pasando los minutos y los minutos, con el equipo practicando pases y pases horizontales, cortos, sin velocidad, sin movimientos por lo que se veía que el partido se podía poner cuesta arriba. Y luego es tarde para arreglarlo.
El único peligro en la primera parte disparos lejanos muy desviados, dejando al portero rival inédito. Lo único un penalti en el área del Getafe que podría haber dado ventaja en el marcador. También hay que decir que en la siguiente jugada en el área blaugrana, ellos también han reclamado uno. Éste menos claro que el primero.
Ellos han tenido su ocasión clara de gol como no podía faltar con el Barça en el campo, pero Bravo ha conseguido desviarla con la punta de los dedos a córner.
En la segunda parte no ha mejorado la cosa. Una marcha más rápida a la hora de mover el balón, lo que ha generado más cercanía del peligro a la portería rival pero sin generar peligro. Solo a balón parado. Nueva falta al larguero de Messi y otro disparo de falta lateral que ha despejado el portero. Peligro, ninguno más. Solo la sensación, pero nada más.
Los cambios no han servido de mucho. Las últimas salidas en liga se han saldado con victorias por la mínima muy trabajadas. Hoy no ha podido ser y ya se intuye que empieza a escaparse el tren de la Liga. ¡Al loro!
No hay comentarios:
Publicar un comentario