Partido complicado, sobre todo en la primera parte contra un rival correoso y que ha planteado un partido muy competido. Ellos han salido presionando arriba y haciendo marcaje al hombre a los centrocampistas y a los delanteros blaugranas. Esto ha generado dificultades en la salida del balón, con mucha combinación entre centrales y dejando a Mascherano siempre solo para que fuera él el jugador que tuviera que salir con las pelota jugada.
El juego del equipo se resentía. Messi y Neymar tenían que bajar a recibir para iniciar las jugadas de ataque. Esto generaba que los balones llegarán en pocas ocasiones a las inmediaciones del área y con una falta de acierto con muchas imprecisiones en el último pase. Ellos también cerraban con muchos hombres la zona central.
Ocasiones en esta parte pocas. Una muy clara de Neymar que para colosalmente el portero, un disparo cruzado fuera de Suárez y la falta de Messi que ha supuesto el primer gol.
Ellos también han llegado a nuestra portería con varias paradas excelentes de Bravo y con un penalti tonto de Alba que ha significado el gol del empate que dejaba un marcador ambiguo en el descanso.
Pero como viene siendo habitual, la rajada de Luis Enrique en el descanso hace que el equipo salga con otra marcha más en la segunda parte. Porque si no, no lo entiendo. La intensidad de equipo ha subido un peldaño y enseguida han empezado a llegar las ocasiones. El Celta se ha tenido que meter en su área.
Primer jugadón de Neymar que hay una croqueta en el área y centra para que Suárez remate al palo. Aparecía el fantasma del año pasado con cuatro palos y cero goles. Pero hoy no ha sido así. Otro remate de Iniesta que saca de forma impecable el portero rival. Hasta que ha llegado la jugada de Messi que levanta la pelota de cuchara para Suárez dentro del área y remata de primeras para marcar el segundo y ponerse por delante del marcador.
En este momento han entrado Aleix Vidal por un Alves muy impreciso y Rakitic por Iniesta, que ha cedido el brazalete a Messi. De nuevo el Barça ha bajado el pistón permitiendo que el rival llegara a nuestra área generando algunas jugadas con disparos a portería que Bravo ha podido salvar sin demasiados problemas.
Pero de nuevo ha llegado la eficacia de los blaugrana contra un Celta muy abocado en ataque. De nuevo Neymar recibe la pelota dentro de la área y vuelve a hacer otra croqueta al portero y su remate cuando el balón se iba lo desvía un poco un defensa y Luis Suárez que entraba por el otro palo remacha la pelota a la red. Gran jugada.
Aunque todavía quedaba lo mejor. Neymar realiza una lambretta en la zona de medios y al final dela jugada llega la pelota a Messi en un lateral del área, donde se hace al defensa con otro regate estratosférico pero el defensa le hace caer cuando marchaba solo. Penalti que solo unos genios pueden pensar en lanzarlo de otra manera. Messi coge el balón y todo parece que lo lanzará de la forma tradicional. Pero no. Se acerca al balón y lo toca hacia su derecha para que Suárez que entra como una bala lo remate a portería consiguiendo el cuarto. La sorpresa ha sido monumental.
En esos momentos el Celta se ha visto ya superado en los últimos minutos todavía ha dado tiempo para dos goles más, el quinto de Rakitic en una internada en profundidad y el sexto de Neymar, con un excelente control orientado y balón picado ante la salida del portero.
Una segunda parte para el recuerdo y para generar polémica donde no la hay por parte de las seguras envidias que están generando estos jugadores. Por desgracia, no sana.
El miércoles puede darse un paso importantísimo en la Liga si se consiguen los tres puntos, consiguiendo una gran ventaja ahora que dará comienzo la Champions que es la competición que más castiga para la Liga, ya que el foco de los titulares se concentra en estos partidos. A ver cómo se da.
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