Hacía mucho tiempo que no pasaba tantos nervios.

24ª jornada de liga 2010-11.

FCB-2; Bilbao-1.

FCB: Pinto; Dani Alves, Piqué, Sergio Busquets, Abidal, Mascherano (Maxwell, min.65), Xavi, Iniesta, Messi, Villa (Keita, min.84) y Pedro (Afellay, min.90+2).

Ahtletic: Iraizoz, Iraola, Ekiza, Amorebieta, Koikili, Susaeta (David López, min.84), Javi Martínez, Gurpegi, Gabilondo (Munianin, min.71), Iturraspe (Toquero, min.46) y Llorente.

Goles: 1-0: Villa, min.4. 1-1: Iraola (p), min.50. 2-1: Messi, min.77.

Árbitro: Ramírez Domínguez (Colegio andaluz). Mostró tarjeta amarilla a Koikili (min.24), Iraola (min.32), Alves (min.36), Sergio Busquets (min.49), Piqué (min.52) y Guerpegui (min.90+2).

Incidencias: Partido disputado en el Camp Nou ante 83.533 espectadores.

Me explico. El Barça ha hecho un gran partido superando en todo momento al Bilbao (ha llegado en algun momento al 80% de posesión), pero la incerteza del resultado ha podido más que el mismo. El control era total aunque en la primera parte no se han hecho muchas ocasiones, lo que ha hecho que el Bilbao estuviese siempre dentro del partido. Más cuando por un error defensivo han cosechado un penalty con el que han conseguido el empate a uno y poner los nervios de punta en los jugadores del Barça.
Eso que la cosa empezaba bien. En el minuto 4, Villa remata a gol un centro de Alves, en una de sus internadas habituales (y tras otro pase descomunal de Xavi-a lo que nos tiene acostumbrados-). Jugada en la es posible que Alves estuviera en fuera de juego, pero si lo es, también es cierto que en la segunda parte ha habido un penalty clamoroso a Messi y no lo ha pitado (no puede quejarse nadie, siempre nos han quitado más que nos han dado).
Y control y más control. Pero quizás se notaba que algunos jugadores no tenían su finura habitual, lease Iniesta y Messi, cosa que ha cambiado en la segunda parte, con el empate. Además, Guardiola ha introducido cambios tácticos poniendo a Busquets de central pero con mucha libertad. Cuando atacabamos, Busquets subía a mediocampo por el lado izquierdo, dejando a Piqué y Abidal solos atrás controlando a Llorente (el único punta del Athletic). También Pedro ha empezado en banda izquierda y Villa como delantero centro. Posicionamiento ofensivo total dada la disposición táctica del rival que ha jugado con un 4-5-1 (en ocasiones 6-3-1). Parece que los rivales intentan desconectar la conexión Xavi, Iniesta y Messi en la zona central del campo. El hecho de que el Barça últimamente se esté obcecando en el juego por el centro y obviando las bandas hace que los rivales formen todos sus medios en el centro y dejando los espacios justo en esas bandas que están solo ocupadas por los laterales.
La verdad es que en los últimos minutos de la primera parte me ha recordado el partido contra el Mallorca, que después de un monólogo del Barça, el Bilbao ha empezado a estirarse y Llorente ha tenido un remate de cabeza que Pinto ha sacado "in extremis". Para colmo, nada más empezar la segunda, Abidal da un mal pase a Busquets hacia el área propia y éste hace caer a Llorente. Penalty claro e Iraola ha conseguido el empate. Me han aparecido todos los fantasmas de aquel partido en el que no entraba nada.
El Bilbao ha empezado a creerse que podia sacar algo positivo de este campo y se ha colocado aún más cerrado en su área, intentado salir a la contra con su futbol directo. Iniesta ha cogido las riendas del centro del campo y Messi buscaba el balón insistentemente. Pero se insistia demasiado por el centro. Incluso así, se han conseguido ocasiones, El penalty de Messi no pitado, centros que no llegaban a los delanteros, demasiadas piernas para que el balón pasara.
Hasta que ha salido Maxwell por Mascherano volviendo al dibujo habitual y en otra buenísima entrada de Alves por la banda, centro raso y Messi levanta la pelota entrando en la porteria y desatándose la euforia. Dos a uno y ansiedad rebajada para ganar el partido con buena solvencia y golpe de autoridad sobre la mesa.
A pesar de la falta de finura, el equipo sigue con su intensidad de juego y esperemos recuperar este "toque", la esencia de este equipo para volver a llegar a su nivel máximo y conseguir los objetivos planteados para esta temporada.