martes, 30 de noviembre de 2010

Festival, partidazo, baile, baño, la esencia del fútbol,...

13ª jornada de liga 2010-11.

FCB-5; R. Madrid-0.

FCB: Valdés; Alves, Puyol, Piqué, Abidal; Busquets, Xavi (Keita, m.86), Iniesta; Pedro (Jeffren, m.86), Messi y Villa (Bojan, m.76).

Real Madrid: Casillas; Sergio Ramos, Pepe, Carvalho, Marcelo (Arbeloa, m.60); Xabi Alonso, Khedira; Di Maria, Özil (Lass Diarra, m.46), Cristiano Ronaldo y Benzema.

Goles: 1-0, m. 10: Xavi. 2-0, m.18: Pedro. 3-0, m.55: Villa, 4-0, m.57: Villa. 5-0, m. 90+1: Jeffren.

Árbitro: Iturralde González (col. vasco). Mostró cartulina amarilla a Víctor Valdés (m.32), Cristiano Ronaldo (m.32), Villa (m.34), Pepe (m.36), Messi (m.45), Xabi Alonso (m.51), Marcelo (m.56), Casillas (m.56), Carvalho (m.71), Sergio Ramos (m.73), Khedira (m.75) y a Puyol (m.80). Expulsó a Sergio Ramos (m.92) por agredir a Puyol.

Incidencias: 98.255 espectadores asistieron al encuentro correspondiente a la decimotercera jornada de Primera División, disputado en el Camp Nou.

Partidazo. Es de aquellos que se guarda uno el video para poder enseñar a sus nietos como jugaba este equipo. Velocidad, movimiento, primer toque, pase corto, profundidad, salidas por las bandas, entradas por el centro,... . Y es que el Barça pasó como un rodillo por encima del eterno rival, demostrando la diferencia que existe entre los dos equipos(no menos cierto es que estos dos equipos están a años luz del resto de la liga-la liga de los estrellaos- la llamo yo).
Todo se puede explicar desde el error garrafal que tiene Mourinho en el planteamiento del partido. El señor "ego" quiso disputar el partido de tú a tú, con su equipo de gala, y esa fué su perdición. El Barça con una presión asfixiante al rival, no les dejaba a los defensas otra salida que el balón largo, ya que el Madrid es un equipo partido en dos, los que defienden y los que atacan. El Barça bien situado controlaba la situación. Busquets, Xavi e Iniesta, más Abidal y Alves por las bandas, siempre ganaban en número a los rivales, con Xabi Alonso y Khedira como pivotes defensivos, un Ozil perdido en el campo (la defensa no es lo suyo) y Ronaldo y Di Maria que no ayudaban mucho más. El no haber sacado un tercer centrocampista de corte defensivo mató al Madrid.
El Barça empezó a engrasar la máquina con un primer tiro de Messi con rosca y casi sin ángulo que pegó en el palo de la portería a los cinco minutos. Primer aviso.
En el minuto diez llega el primer gol. Jugada en la que Iniesta recibe escorado a la banda izquierda, se viene hacia el centro y mete un pase a Xavi, que entraba desde la segunda línea por el centro, y levanta el balón por encima de Casillas. El delirio en la grada.
Minuto dieciocho. Villa recibe en banda izquierda, entra en el área, desborda a Sergio Ramos y su centro lo remata Pedro al fondo de la red. 2 a 0, y los nervios a tomar por saco. Se veía que les iba a caer una tromba de juego por todos lados.
En los siguientes minutos, Di Maria probó a Valdés, que desvió a corner y Abidal despejó a corner por poco un centro envenenado de Ronaldo. Ahí se acabó todo el bagaje ofensivo del Madrid.
El Barça tocaba y tocaba en una especie de baile en medio campo y los rivales solo hacían que perseguirles de un lado al otro sin saber como robarla. Y en el último cuarto de hora de la primera parte, apareció Ronaldo para dar su toque de excentricidad al partido (ya que futbolisticamente hablando no aportó nada de nada).
Balón fuera de banda que coge Guardiola y como no le entrega el balón, le da un empujón que sin ser agresión, es un gesto muy feo por parte del jugador. Tangana y parón en el partido. Pero a diferencia de otros partidos, el Barça no se salió del mismo y aunque con menos ocasiones de gol, seguía dominando el juego. El Madrid intecambió los hombres de banda y al empezar la segunda parte, sacó a Lass por Ozil, intentando enmendar el error inicial. Pero era demasiado tarde.
En la segunda parte solo ocasiones del Barça. El rondo del Barça era inacabable, y el Madrid, a remolque, completamente rendido, ya no sabía que hacer para acabar con su pesadilla. En el 47', Casillas salvó a los suyos en una doble ocasión de Messi y Villa; en la jugada siguiente, el árbitro anuló un gol al '10' del Barça por una falta previa de Pedro. Y en el 51', Xavi envió fuera una asistencia de Messi.
Hasta que aparece Villa (55' y 57') con dos internadas en profundidad y marcando dos golitos en su cuenta particular (para que Mourinho tome nota) a dos grandes pases de Messi, que a pesar de no marcar, estaba dando un recital de repartir juegos a sus compañeros.
Con 4-0 en el marcador, el Barça se dedicó a controlar el balón, dando algún que otro picotazo pero con menor intensidad. Mientras, el Camp Nou se recreó con la víctima favorita de la grada, Mourinho, protagonista en pancartas como la que decía "Hoy, mañana y siempre, Mourinho traductor", tuvo que escuchar luego cánticos como el clásico "Vete al teatro, Mourinho, vete al teatro", o el novedoso "Sal del banquillo, Mourinho sal del banquillo".
Para cerrar la fiesta Jeffrén marcó el 5-0 con el tiempo casi cumplido. La imagen de Sergio Ramos, expulsado por una brutal entrada a Messi en el descuento, fue el fiel reflejo de la impotencia 'merengue'. Este tipo de comportamientos debería castigarse ejemplarmente. Ellos, con sus provocaciones verbales constantes, son los que han despertado a la bestia futbolisticamente hablando. Así que ahora que no se quejen si les han dado un baño en toda regla.

Por cierto, el Gijón con los suplentes dió más trabajo al Barça que este Madrid.

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