Después de las paradas por selecciones el grupo debe volver a su rutina habitual de entrenamientos y juego, cosa que por lo general suele costar. El hecho de jugar en casa y contra un recién ascendido daba cierta confianza, mismos motivos para generar nervios cuando pasaban los minutos y no llegaba el gol.
Para empezar sorpresas en la alineación. Busquets y Rakitic en la grada, Iniesta en el banquillo. Medio campo inédito, con Mascherano, Xavi y Sergi Roberto. Atrás y delante sin sorpresas.
Ha empezado el partido con el equipo bastante enchufado. Sobre todo el foco en ataque lo llevaban Messi y Neymar. Ellos con cinco hombres en la defensa y cuatro por delante, con un solo punta. Las bandas las dejaban libres tapando siempre la zona central. Esto ha hecho que el juego se decantara hacia la banda derecha donde Alves recibía como de costumbre en posición estática, lo que le impide conseguir una buena posición de centro, dada su falta de desborde. Si a esto añadimos que por aquí deambulaba Pedro, en un estado de juego bastante bajo, hacia que los centros fueran rechazados por la defensa o no encontraran nunca rematador.
La intensidad era buena, sobre todo la primera media hora, pero como es habitual también, las ocasiones de gol eran mas bien escasas. Una combinación entre Alves y Messi que el portero ha sacado con el talón de la bota cuando la bola le había pasado entre las piernas.
Pero antes del descanso han llegado dos jugadas del Eibar, clarísimas, donde con dos pases largos a la espalda de los centrales, un delantero ha llegado al área con oportunidad de marcar. La primera ha sido clamorosa, Piqué pierde de vista al delantero, Bravo sale tarde y es driblado e incomprensiblemente el delantero la ha rematado al lateral de la red. La segunda la ha sacado imponentemente Bravo.
Con estas dudas se ha llegado al descanso.
En la segunda parte había que cambiar la dinámica. Nada mas empezar se ha visto al equipo más incisivo en ataque. Hasta que por fin ha llegado el primer gol. Gran jugada combinativa donde Xavi cede a Messi y se va en profundidad para que Leo levante la cabeza y le de el pase interior y pueda cruzar la pelota ante la salida del portero. Lata abierta y el rival se ha desecho mentalmente.
Enseguida ha llegado el segundo en una jugada en la que Alves, esta vez si, ha conseguido un centro raso preciso para Neymar que remata a la red de primer golpeo. Reconocer que el espacio se lo genera Sandro arrastrando a varios defensas hacia dentro.
Decir que había entrado Iniesta y Sandro para sustituir a Sergi Roberto, que ha recibido un encontronazo fuerte con un rival, y a Pedro, muy diluido.
La cereza la ha puesto Messi con un gol bonito tras combinar con Neymar, acercándose ha ese récord de Zarra. A punto de caer.
El último tramo del partido ha sido bastante flojo dejando pasar el tiempo con un Iniesta y Messi como jugadores más activos en ataque, pero sin grandes alicientes.
La semana entrante veremos en que punto se encuentra el equipo tras enfrentarse al Ajax y al Madrid, aunque sin ser decisivos en lo que queda de temporada.
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